Lo siento, aquí no hay un artículo sobre Ayotzinapa, pero sí tiene que ver. Esto es un experimento para ver cuánta de la gente que comenta en nuestras redes sociales realmente lee las notas sobre las que comenta.

Tomé la idea de la famosa broma de April’s Fools de NPR. Al principio pensé que era inmoral hacer lo mismo, pero en el fondo creo que esto debería hacerse más seguido. Todos los medios en línea deberían hacer una de estas notas de broma una vez a la semana, sólo para desenmascarar a sus supuestos lectores.

¿Es un pecado comentar sobre una nota que no leíste? No, sólo es inútil y tonto. Me gusta la idea de que haya interacción en todo tipo de contenido, que la gente comente en noticias y columnas de opinión, en teoría, es perfecto. En la práctica, la sección de comentarios de cualquier noticia, literalmente cualquiera, es un foro abierto para improvisar incoherencias. ¿Nunca se han metido a ver los comentarios de alguna nota en Aristegui.com? No quiero decir que sus lectores son tontos, pero parece que el autor del comentario más estúpido se gana un auto, y la competencia es bien reñida. Lo he dicho antes, hay que reconocer la plaga de estupidez que sufre nuestra sociedad, pero tampoco creo que sea el único culpable. La teoría que trato de probar con esta nota es que en muchos casos los comentarios tontos se deben a que la gente no lee los textos que está comentando.

“No era el Chapo”

El caso más famoso que puedo recordar es hilarante: Álvaro Cueva publicó una nota satírica titulada “No era el Chapo”, donde comienza inventando una teoría de la conspiración como prueba de que aquél que detuvieron el 22 de febrero de 2014 no era El Chapo Guzmán; luego, a medio artículo (ni siquiera al final) dice “haha, chairos estúpidos, todo esto me lo acabo de inventar, además no hubo fraude y Santa Claus no es real”, o algo así. Lo chistoso fue que la gente empezó a compartir la nota sin haber leído que todo era mentira. La columna se volvió viral por las razones equivocadas y hasta se hicieron memes con fotos sacadas de no sé dónde, explicando la conspiración. Aún hoy, si te metes a la bendita sección de comentarios, la mitad de las opiniones son de gente que no entendió el chiste.

Pero no era el Chapo, era el Mario Bros

¿Por qué lo hacen? El conocimiento es un buen símbolo de status, es algo por lo que debes trabajar todos los días, que habla de tu personalidad y tu carácter; no lo puedes comprar o robar pero es bien fácil fingirlo, lo sabré yo que trabajo en publicidad, una industria donde la mitad de la gente que tiene éxito es experta en abrirse paso por la vida a base de puro bullshit. Cuando una tragedia como la de Ayotzinapa golpea al país, inevitablemente se convierte en tema de conversación, en una pieza más de conocimiento que la gente aprovecha como quiere. No niego que haya millones de mexicanos genuinamente indignados por el tema, que tratan de informarse para ayudar en lo que se pueda; lo que digo es que también hay mucha gente que sólo comparte notas que no leyó para agregar ese adorno con tonos de justicia social al autorretrato en línea que pinta todos los días.

Hoy hablamos de injusticias sociales igual que los hipsters hablan de música, buscando el conocimiento más nuevo para demostrar que nuestra causa es mejor y que nosotros somos mejores que el resto. ¿Recuerdan el Ice bucket Challenge? ¿Recuerdan a los tetazos que salieron a quejarse de que estaban desperdiciando agua? ¡Qué montón de perdedores!

Está bien comentar y está bien compartir, el problema es cuando utilizas una plataforma de información para iniciar un diálogo de sordos y decir ahí lo que querías decir desde el principio. Por eso la gente se olvidó de Ayotzinapa, porque desde el principio no les importó.

Ahora, si llegaste hasta aquí, automáticamente formas parte de una comunidad secreta. Primero quiero agradecerte, porque me gusta mucho cuando la gente me lee y así. Por el bien de la sociedad espero que mi teoría sea falsa, pero para que este experimento funcione necesito pedirte un favor: comparte esta nota, sin un título ni un comentario personal. Si pensabas en revelar el chiste, recuerda que a nadie le gustaba en la primaria cuando le preguntabas al profesor si iba a revisar la tarea, no lo hagas. Si realmente quieres compartir que leíste la nota y que entendiste el chiste, postea una winky face ;), esa será nuestra clave secreta. Sólo postea esto en facebook y ve cuánta gente comenta, ve cuántos indignados dicen algo sin haber leído la nota, si puedes mándanos un screenshot de sus comentarios y recuerda nunca más tomar sus opiniones en cuenta.